1 de enero de 2013

Esa palabra que me falta

El ejercicio de las letras, la vaga erudición, el aprendizaje de los cuentos, la falsa elocuencia, la fluidez discursiva... la compulsión por parlar sin parar, la supuesta importancia de hablar mierda o los hilos invisibles del tejido social, el necio vicio de babear ocurrencias y escupir ensaladas de palabras tan vacías, tan llenas de nada… de qué pueden servir si el significado de la vida me sigue siendo esquivo e imposible de nombrar...


1 comentario:

Mauricio Díaz Luján dijo...

PILOTEANDO INCERTIDUMBRE, RECORRIENDO ABANDONO, RESPIRANDO ANSIEDADES, BALBUCIANDO DESEOS.